La magia es un arte que fascina tanto a adultos como a los niños. Hasta los 4 años, los niños piensan que la magia es magia, sin más. Hasta los 2-3 años, los niños no diferencian la realidad de la fantasía. Encender una luz o mezclar dos colores y que resulte otro (rojo+amarillo=naranja) es igual de mágico. En cambio, a partir de los 4 años, se produce un desarrollo madurativo importante. Pero a partir de esa edad, ya empiezan a sospechar que detrás de la magia puede haber algún truco.
¿Qué mejor forma de entretenerse que aprendiendo trucos de magia?
Además, realizando trucos de magia, los más pequeños adquieren disciplina, confianza, creatividad y memoria ya que tienen que ensayar repetidamente y ser constantes para acabar dominando los trucos sin olvidarse de cada paso a seguir. También potenciarán su capacidad de comunicación y capacidad intelectual al tener que hablar en publico y aumenta de la misma forma su razonamiento lógico.
Os dejamos algunas recopilaciones de trucos de magia sencillos de entender para niños. Entre truco y truco, no olvidéis pronunciar alguna de las palabras mágicas, como ¡Abracadabra!